Perder una pieza dental es un problema muy común entre adultos y también puede afectar niños y adolescentes, ya que puedes ser por diferentes razones y una de las más comunes es por traumatismo que suelen ser accidentes en los que se provoca una rotura de los huesos de la mandíbula llevando a la perdida de dientes. Aunque también es muy común perder dientes a causa de enfermedades o problemas en las encías, como en el caso de las caries no tratadas o la periodontitis, una infección tan grave que daña el hueso que sostiene los dientes.